¿Qué son las áreas verdes?
La Política regional de áreas verdes del Gobierno Regional Metropolitano de Santiago, publicada en el año 2014, define área verde como “una superficie abierta, natural o artificial, de dominio público o privado, dónde la vegetación juega un rol importante”.
Una definición bastante escueta, por decirlo menos, ya que en ella entraría prácticamente todo el espacio público que cuente al menos con un arbusto pequeño o un poco de maleza. Empero, cuando se avanza en el documento se aclara que las áreas verdes están destinadas al “uso y goce colectivo al mismo tiempo que generan beneficios sociales, ambientales y económicos”.
Ahora es cuando se comienza a poner interesante. El documento -vigente hasta el día de hoy- enumera una serie de lugares que son considerados áreas verdes por los organismos públicos. Entre ellos, parques, plazas, cementerios, rotondas, enlaces, etc. Al final del listado se hace la siguiente aclaración: “en definitiva, todo espacio con presencia de cobertura vegetal”.
Entonces nuevamente…
¿Qué es un área verde?
Un concepto en verde
No existe unanimidad a la hora de definir el término área verde. Pareciera que es conocido desde el inicio de los tiempos modernos, pero no es así.
En conversaciones con la académica de la Universidad Central y Magíster en Derecho Ambiental, Arquitectura y Paisaje, Jadille Mussa, explica que un espacio no puede ser considerado área verde por el solo hecho de contener vegetación en él, sino que además debe cumplir con ciertas características y estándares para ser poseedor de aquel nombre.
Ahora bien, que a un espacio público determinado se le otorgue la etiqueta de área verde no significa que la tarea está completa, ya que luego de inaugurado, lo que viene después es tanto o más importante que la construcción en sí del espacio.
Para Jadille Mussa, el correcto mantenimiento de las áreas verdes es fundamental para el bienestar de la población, sobre todo la que habita en las cercanías del espacio. No sólo eso, en muchas ocasiones este mantenimiento es la causa por la que lugares que se ganaron la etiqueta, puedan perderla con la misma facilidad.
Hasta el momento todo este reportaje se ha planteado en torno al uso humano de espacios públicos denominados áreas verdes. Según la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y la Organización Mundial de la Salud (OMS), las ciudades, para ser consideradas saludables, deben presentar áreas verdes con buena accesibilidad, calidad y seguridad para la población que las utilice.
«La académica de la Universidad Diego Portales dobla su apuesta, sostiene que los espacios verdes no tienen porqué ser considerados en su totalidad para el uso y goce del ser humano, sino que pueden y deben existir áreas verdes que retribuyan a la naturaleza algo de lo que la especie humana la ha despojado. Tomando como ejemplo la Laguna de la Biofactoría de La Farfana, reflexiona sobre este punto.»
Indicadores nacionales
En Chile, el monitoreo del acceso y la cuantificación de la infraestructura verde está a cargo del Sistema de Indicadores y Estándares de Desarrollo Urbano (SIEDU). Este sistema fue creado en 2014 como parte de la implementación del Consejo Nacional de Desarrollo Urbano (CNDU), organismo instaurado durante el cierre de la primera administración del expresidente Sebastián Piñera.
El CNDU es un organismo público encargado cuya misión principal es garantizar el cumplimiento de la Política Nacional de Desarrollo Urbano (PNDU). Según su sitio web oficial, entre sus funciones destaca asesorar directamente al o la Presidente de la República en la planificación y ejecución de políticas relacionadas con el desarrollo urbano sostenible.
Para asegurar el seguimiento y la evaluación de los objetivos establecidos en la PNDU, se diseñó el Sistema de Indicadores y Estándares de Desarrollo Urbano (SIEDU), una herramienta que permite medir de manera periódica el progreso de las ciudades chilenas en función de sus indicadores de desarrollo urbano. Este sistema no solo proporciona datos clave para evaluar la calidad de vida urbana, sino que también facilita la identificación de brechas en aspectos críticos como el acceso a áreas verdes y otras infraestructuras esenciales, como hospitales o colegios.
Según Sonia Reyes y Francisco de la Barrera, en su estudio del 2019 titulado Monitoreo de los avances en desarrollo urbano: análisis de los catastros de áreas verdes urbanas en el Área Metropolitana de Santiago, Chile, el objetivo de los indicadores propuestos por el Consejo Nacional de Desarrollo Urbano (CNDU) es “conocer la posición relativa de las ciudades chilenas en relación con los objetivos de la Política Nacional de Desarrollo Urbano y evaluar la efectividad de las políticas públicas orientadas a asegurar la calidad de vida urbana”.
El SIEDU se basa en ocho compromisos planteados tanto por la PNDU, como por la Nueva Agenda Urbana de Hábitat III de la ONU y las directrices planteadas por la OCDE. Estos son:
- Mejor acceso a servicios y equipamientos públicos básicos
- Mejor acceso a movilidad sustentable
- Mejor calidad del medio ambiente urbano
- Mayor integración social y calidad de barrios y viviendas
- Más y mejor planificación de ciudades y regiones
- Mayor crecimiento económico inclusivo y sostenible para el desarrollo urbano
- Mayor protección del patrimonio cultural
- Mayor y mejor participación de la sociedad civil en las decisiones de desarrollo urbano
El último año de actualización de datos en la mayoría de indicadores es el 2019, sin embargo hay estándares actualizados al 2020.
Es en el primero de los compromisos asumidos por el SIEDU, el que busca medir el acceso de la población a servicios y equipamientos públicos básicos, en el que encontramos la mayor parte de indicadores relativos a la accesibilidad a Bienes Públicos Urbanos (BPU) dentro de los que se contabilizan parques públicos y plazas públicas, siendo la suma de ambas la cantidad de áreas verdes por comuna. Un total de 6 indicadores miden índices de áreas verdes comunales en Chile según datos del INE de 2018, estos son:

El SIEDU considera como parque a aquella área verde que cuenta con una superficie igual o mayor a 20.000 m2, mientras que se considera una plaza a los espacios que van desde los 450 hasta los 20.000 m2.